La familia Formigo de la Fuente mantiene desde hace innumerables generaciones una estrecha relación con el vino en la comarca del Ribeiro. Después de formar parte durante las últimas dos décadas de una bodega industrial han dado un salto de calidad. Criado en una familia con larga tradición vitícola en el Ribeiro (su padre Agustín Formigo Raña fue fundador de Señorío de Beade), en 2006 Manuel Formigo creó su propio proyecto de colleiteiro, una categoría reservada para aquellos productores que elaboran vinos de sus propios viñedos sin sobrepasar los 60.000 litros de producción anual. Destaca su interés por la recuperación de variedades minoritarias.
La bodega se sitúa en el bajo de la antigua casa familiar. Construida con una doble pared de piedra de más de doscientos años de antigüedad, la bodega ha visto producir y elaborar durante muchos años vinos de calidad, utilizando para ello las técnicas tradicionales, pasadas de generación en generación.
Apoya su trabajo en seis hectáreas repartidas en siete fincas diferentes ubicadas en el municipio de Beade, en la margen derecha del Avia con orientaciones en general bastante favorables que reciben el sol durante todo el día y asentadas en su mayoría en suelos graníticos de descomposición arenosa conocidos localmente como sábrego.
Como es habitual en Ribeiro, la mayoría de los vinos se apoyan en ensamblajes de variedades construidos en torno a la uva mayoritaria, la treixadura. Todos los vinos se trabajan en acero inoxidable con levaduras seleccionadas neutras y sin trabajo de lías. Para Formigo, “lo más importante es saber cuándo vendimiar cada variedad”.