La DO vinos de DO Cava
Los vinos de la D.O. Cava se han creado su propia identidad en los principales mercados internacionales durante la última parte del siglo XX. El cava es elaborado del mismo modo que el champán, pero factores como el empleo de uvas autóctonas, un clima templado y zonas heterogéneas de cultivo han contribuido a configurar su propio carácter.
El término Cava proviene de la palabra empleada para designar las cuevas donde tradicionalmente se ha elaborado en el corazón de la producción de este vino espumoso, que se sitúa en la localidad catalana de Sant Sadurní d’Anoia, al sur de la provincia de Barcelona, donde las bodegas especializadas en su elaboración lo han producido con fines comerciales desde finales del siglo XIX. En la actualidad, esta zona todavía concentra el 85% de toda la producción. Sin embargo, el área de cultivo permitida incluye 160 términos municipales situados en siete Comunidades Autónomas repartidas por todo el territorio español, entre las que se incluyen Aragón, Navarra, La Rioja, Extremadura o Valencia.
Al igual que sucede con el champán, cada productor realiza su particular cuvée (mezcla de uvas) a partir de viñedos.
Entre las más recientes tendencias destaca el aumento de la plantación de uvas Chardonnay, la vinificación en bodegas situadas junto a los viñedos y la revisión de las normas con el objetivo de indicar el año de la vendimia en las etiquetas de los cavas Brut y Brut Nature.
En Cava se elaboran excelentes vinos espumosos, que en función del azúcar residual aportado por el licor de expedición se clasifican como Brut Nature, Extra Brut, Brut, Seco, Semiseco y Dulce.
Las características de los cavas dependerán de las diferentes combinaciones varietales, añadas y también de los distintos períodos de crianza.