Michel Couvreur
La bodega de Michael Couvreur está situada en Borgoña y puede presumir de elaborar uno de los whiskys más excepcionales del mundo.
Michel Couvreur es un embotellador independiente belga de whisky escocés de malta. Sus bodegas están ubicadas en Bouze-les-Beaune, en el corazón de Borgoña. Michel añeja sus whiskies de malta en botas de jerez y luego en toneles donde se mantienen en la oscuridad total en las galerías subterráneas de la bodega. Se encuba a partir de 54 whiskys de edad superior a 12 años (entre 12 y 27 años) en barricas de roble.
La firma de Michel Couvreur, ante todo, proviene de un proceso de maduración de whiskies principalmente en barriles de Jerez y Oporto. Pero la singular identidad de nuestros whiskies también se debe a los efectos de las bodegas Bouze-lès-Beaune, ubicadas en Borgoña, a medio camino entre Andalucía y Escocia. Ciento cincuenta metros de notables galerías subterráneas excavadas en las profundidades de la roca borgoña, un lugar de humedad y silencio. Una selección de barriles específicos, y su cuidado de ir y venir entre las partes secas y húmedas de la bodega imbuyen a los whiskies Michel Couvreur con una intensidad muy poderosa y una redondez suave. Varios años de envejecimiento les otorgan un estilo típico y nobleza.
Michel Couvreur es un embotellador independiente belga de whisky escocés de malta. Sus bodegas están ubicadas en Bouze-les-Beaune, en el corazón de Borgoña. Michel añeja sus whiskies de malta en botas de jerez y luego en toneles donde se mantienen en la oscuridad total en las galerías subterráneas de la bodega. Se encuba a partir de 54 whiskys de edad superior a 12 años (entre 12 y 27 años) en barricas de roble.
La firma de Michel Couvreur, ante todo, proviene de un proceso de maduración de whiskies principalmente en barriles de Jerez y Oporto. Pero la singular identidad de nuestros whiskies también se debe a los efectos de las bodegas Bouze-lès-Beaune, ubicadas en Borgoña, a medio camino entre Andalucía y Escocia. Ciento cincuenta metros de notables galerías subterráneas excavadas en las profundidades de la roca borgoña, un lugar de humedad y silencio. Una selección de barriles específicos, y su cuidado de ir y venir entre las partes secas y húmedas de la bodega imbuyen a los whiskies Michel Couvreur con una intensidad muy poderosa y una redondez suave. Varios años de envejecimiento les otorgan un estilo típico y nobleza.
