Domaine de la Romanée-Conti, Richebourg, 1996

Romanée-Conti es un sinónimo indiscutido del prestigio, grandeza y perfección de los vinos de Borgoña. La excelencia de los diferentes terruños que integran el domaine, el tratamiento ejemplar de las viñas y de las vinificaciones, son los fundamentos que definen la asociación ideal entre los atributos de la naturaleza y el buen hacer del hombre. Los vinos que elabora esta inigualable propiedad en Richebourg se distinguen por su densidad aromática, plenitud, estructura y majestuosa armonía. El de 1996 exhibe una noble madurez, en la que aún asoman con fuerza las notas de fruta roja fresca, especias y minerales y una boca amplia, equilibrada y muy persistente. Se sugiere servir a 16º, acompañando carnes de caza.