Widow Jane recorre el país en busca de los mejores barriles de Straight Bourbon & Rye Whiskeys. Ensamblados a mano en el barrio de Red Hook de Brooklyn, Nueva York, sin filtración en frío, y elaborados con un agua caliza pura, dura pero dulce, procedente de las legendarias minas de Rosendale, al norte del estado de Nueva York.
Todos los whiskies Widow Jane se prueban con agua mineral caliza pura procedente de las legendarias minas de Rosendale, en Nueva York.
¿Por qué esta agua, de estas minas? El cemento de Rosendale era mundialmente conocido por su resistencia. Esta dureza lo convirtió en el material de construcción de principios del siglo XX, y construyó muchos de los monumentos que definen a América. Estas cavernas que se explotaron durante la mayor parte de un siglo permanecieron vacías durante mucho tiempo, y su piedra caliza desapareció. A lo largo de años y años, las precipitaciones se filtraron hacia abajo, a lo profundo de los acuíferos subterráneos, combinándose para llenar las minas con agua dulce y pura que extraía su propia fuerza de la piedra caliza que la acunaba. El resultado, una fuente autorrenovable de agua dulce y única, con un contenido mineral inusualmente alto y, por tanto, perfecta para elaborar y probar un gran whisky.
Esta agua es la huella digital y el ingrediente característico de todos los whiskies Widow Jane.
