

Diseñar una cata de vinos en tu propio hogar es mucho más que una simple reunión: se convierte en una experiencia única que fusiona placer sensorial, sofisticación y momentos de conexión personal, creando un ambiente exclusivo. Además, esta época del año invita a disfrutar de planes en casa, a salvo del frío, y reconectar tras la intensa actividad social de las fiestas. En Lavinia, entendemos el vino como un vehículo para el disfrute, el aprendizaje y la unión. Invitar a tus amigos a una cata en casa es una manera excepcional de compartir tu pasión por la cultura vinícola, fortalecer vínculos y, por supuesto, dejar una huella memorable en cada participante.
En este artículo te guiamos paso a paso para organizar una cata de vinos en casa. Desde la elección del tema y la selección de los vinos, hasta los accesorios necesarios y los detalles clave para crear el ambiente perfecto, encontrarás toda la información necesaria para que tu cata sea un éxito.
¿Cómo hacer una cata de vinos en casa?
Planificación inicial: elige un tema o tipo de cata
El primer paso para crear una cata perfecta es elegir un tema que guíe toda la experiencia. Este será el hilo conductor que conectará cada detalle. Puedes optar por una cata regional que explore los vinos de una zona concreta, como un "Viaje por los vinos de Galicia", o una cata centrada en una variedad de uva, como la versátil garnacha, una centrada en vino tinto... Las posibilidades son infinitas. Si el grupo está compuesto por expertos o aficionados, una cata a ciegas será una opción divertida y desafiante. ¡Nada como poner a prueba el paladar adivinando el origen o la variedad de cada vino! Si prefieres una experiencia más relajada, tal vez optes por una cata temática, como una comparación entre vinos de distintas zonas de España o una cata vertical (mismo vino, distintas añadas) para ver cómo evoluciona con el paso del tiempo.
Selección de vinos: variedad y cantidad recomendadas según el número de invitados
La selección de vinos es esencial para una cata equilibrada. Lo ideal es elegir entre 4 y 6 vinos, aunque si los invitados son verdaderos conocedores, puedes aumentar el número según la duración y el interés del grupo. Asegúrate de que cada invitado pueda degustar entre 60 y 90 ml de cada vino, esto es, una botella por cada 8-12 personas.
No obstante, siempre es recomendable tener una botella adicional por si surgiera algún imprevisto. Si eres un enamorado del vino, es posible que en algún momento te hayas encontrado con alguna botella "con corcho", la forma coloquial de referirse al TCA. El TCA o tricoloroanisol es uno de los defectos más comunes que podemos encontrar en un vino, que afecta al 1-4% del vino embotellado con corcho natural. Este defecto se distingue fácilmente, tanto en el corcho como en el vino, por su aroma a cartón mojado o trapo viejo. También se detecta en la boca, ya que inhibe los sabores y aromas afrutados del vino. Aunque no tiene consecuencias para la salud, sí afecta a la percepción del vino, por lo que una botella con TCA debe ser descartada.
Si la cata incluye una cena, es ideal contar con una botella extra o, incluso, unas burbujas para limpiar el paladar entre vinos y preparar a los invitados para la siguiente etapa.
Accesorios indispensables para una cata de vinos en casa
Copas: tipos y cantidad por vino
Más allá de gustos y de cuestiones estéticas, la forma de la copa influye en la manera en que los compuestos aromáticos llegan a tu nariz y, por tanto, en la percepción del vino. Por ejemplo, las copas de vino tinto suelen ser más grandes y redondeadas para permitir una mayor oxigenación, lo que intensifica los aromas y suaviza los taninos.
Si no deseas disponer de una amplia colección de copas, invertir en unas buenas copas universales es una excelente opción. Lo ideal es que sean de cristal fino, sencillas y transparentes. Evita las ornamentadas o de colores, ya que no permiten apreciar correctamente los aspectos visuales del vino. Asegúrate de que las copas estén perfectamente limpias; puede ser necesario un paño suave para ello.
En cuanto a la cantidad, puedes optar por usar una copa para todos los vinos o disponer de una para cada tipo de vino. Usar una misma copa es práctico, pero habrá que limpiarla entre cada vino para evitar que los sabores o aromas residuales afecten la percepción del siguiente. Por otro lado, tener una copa para cada vino es ideal si quieres maximizar la experiencia, ya que permitirá apreciar cada uno sin interrupciones ni interferencias o volver sobre un vino ya catado para ver cómo evoluciona. Esta opción es especialmente recomendable en catas con vinos de perfiles muy diferentes, como tintos, blancos y espumosos.
¿Decantador, sacacorchos…? Qué necesitas y qué no
Por supuesto, un sacacorchos es fundamental. Entre todos las opciones disponibles, el de tres tiempos, pequeño y funcional, es una apuesta segura.
Para vinos de añadas antiguas o vinos cerrados puede ser útil un decantador, aunque, si el tiempo lo permite, se puede dejar que se abra lentamente en la copa, disfrutando de su evolución.
Si no se dispone de una copa para cada vino, el grupo es muy experto o la cata incluye muchos vinos, una escupidera será útil para desechar el vino sobrante y mantenerse despejado.
Cata como un profesional: cuadernos y fichas de cata
Si quieres añadir un toque personal a la cata, proporciona cuadernos y fichas de cata. Esto permitirá a tus invitados anotar sus impresiones y aprender a degustar como verdaderos expertos. Pueden evaluar aspectos como el color, el aroma, el sabor y el retrogusto de cada vino. Además, un mantel específico de cata puede ayudar a organizar las copas, de forma que cada invitado sepa fácilmente qué vino está degustando. Este detalle adicional será muy apreciado (especialmente, a partir del tercer vino...) y te proporcionará, además, un fondo blanco sobre el que observar el color, claridad, intensidad y otros aspectos visuales del vino.
Cómo crear el ambiente perfecto para tu cata de vinos en casa
Iluminación, música, decoración… cómo realzar los matices del vino
El ambiente es clave para una experiencia de cata memorable. La luz indirecta es perfecta para crear ambientes acogedores, pero para el momento de la cata lo ideal es una iluminación limpia y clara, que permita apreciar los colores del vino. Para la decoración, sigue la filosofía de Mies van der Rohe: "menos es más". Puedes optar por detalles sencillos, inspirados en la naturaleza, y que guarden relación con los vinos que se van a catar.
Cada invitado debe contar con su espacio, con su/s copa/s, un vaso de agua y disponer de servilletas y picos de cata, los clásicos panecillos secos que permiten limpiar el paladar y degustar sin interferencias.
Temperatura de los vinos: un factor clave para el disfrute
Cada vino tiene su temperatura ideal. El vino blanco y los rosados deben estar bien refrigerados, pero no en exceso. Los tintos deben estar un poco más frescos de lo habitual para disfrutar de sus complejidades. Durante la cata, debes sostener la copa por el tallo para evitar alterar la temperatura del vino. De hecho, un buen truco para atemperar un vino demasiado frío, es sostener la copa por el cáliz para que se temple ligeramente.
Que nada distraiga tu olfato: evita ambientadores o perfumes intensos
El olfato es clave en una cata de vinos. Evita inciensos, velas perfumadas y otros aromas intensos en el ambiente y entre los invitados. Se recomienda evitar perfumes fuertes, chicles o caramelos mentolados, ya que pueden alterar la percepción de los aromas. También conviene observan que las copas no tengan olores de lavavajillas o que la casa haya sido limpiada con productos sin fragancias fuertes.
Tipos de catas de vino en casa: elige la que más te inspire
Cata clásica: por regiones, variedades de uva…
Una cata tradicional puede centrarse en comparar regiones vinícolas o variedades de uva. "Un paseo de vinos por España" es una opción ideal para grupos extranjeros. También puedes probar una cata monovarietal de garnachas, una uva versátil que muestra diferentes matices según su origen y elaborador. Otra opción divertida es un desafío entre Rioja y Ribera del Duero, donde los invitados intentan adivinar las diferencias entre estos dos grandes clásicos.
Cata a ciegas: sorprende a tus invitados
La cata a ciegas es decisiva para poner a prueba la destreza de tus invitados y descubrir sus preferencias sin influencias externas. Ideal para mejorar habilidades de cata o prepararse para concursos. Puedes sorprenderles con vinos de distintos países, regiones, uvas o rangos de precio. Es fascinante ver si realmente sabemos tanto como pensamos… ¡o no!
Maridaje: combinando vinos con alimentos
En una cata profesional, los aperitivos suelen ser mínimos, pero si lo deseas puedes acompañar la cata con alimentos, lo que enriquecerá la experiencia y permitirá explorar cómo los sabores de los vinos se complementan con los de la comida. Prepara bocados pequeños, como quesos, embutidos, salazones o conservas. También puedes centrar la cata en maridar vinos específicos, como los de Jerez o Jura. ¡Anímate a probar combinaciones sorprendentes!
Consejos prácticos para una cata de vinos en casa inolvidable
El orden de los vinos: una progresión lógica
Es importante seguir un orden de menor a mayor intensidad: burbujas, blanco, rosado, tinto... Empieza con los más jóvenes y sigue con las añadas más antiguas. Además, un Rioja debería ir antes que un Ribera, siendo ambos de la misma añada. Recuerda que cada vino debe progresar de menor a mayor intensidad para evitar que los sabores más potentes opaquen los más delicados. Abre las botellas con antelación y fíate de tu instinto ¡Los vinos pueden dar sorpresas!
Cómo guiar la cata de vinos en casa: claves para mantener la atención
Como anfitrión, tu papel es guiar la cata de manera que mantengas el interés de los invitados. Comparte detalles fascinantes sobre cada vino: el terruño, las uvas, el proceso de elaboración o curiosidades sobre la bodega. Asegúrate de involucrar a todos y fomentar la conversación. Y, para finalizar, cierra la cata con un brindis épico. Un brindis con burbujas, como champagne o cava, es el toque perfecto para culminar la experiencia y dar paso a la siguiente fase de la velada.
Un buen truco es asistir a una cata de vinos fuera de casa para coger ideas.
Ventajas de contar con un experto para guiar la cata
Si prefieres no complicarte y disfrutar de una cata llave en mano, un sumiller especializado será tu aliado indiscutible. Si decides optar por ello, el sumiller guiará la cata, enriqueciéndola con su conocimiento y pasión, y aportando una perspectiva única sobre cada vino. En Lavinia, disponemos de todo lo necesario para que tu cata sea un éxito. Además de ayudarte a escoger los vinos entre una selección de vinos cuidadosamente elegida, te ofrecemos la posibilidad de contar con un sumiller profesional que animará la cata, aportará su conocimiento experto y resolverá todas vuestras preguntas sobre cada vino. Al final, lo más importante es disfrutar el momento, sin importar las reglas.
Esperamos que este artículo sea de ayuda y te inspire a organizar tu propia cata de vinos en casa, una experiencia única que no solo deleitará a tus invitados, sino que también te permitirá disfrutar de momentos inolvidables compartiendo tu pasión por el vino. Anímate a crear un ambiente especial y a explorar nuevas combinaciones y sensaciones. Recuerda que cada cata es una oportunidad para aprender, conectar y divertirse. Nos encantará conocer tu experiencia, así que no dudes en compartir tus impresiones y consejos con nosotros. ¡Chin chin!